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Redacción deportes (EFE).- El cuádruple campeón del mundo neerlandés Max Verstappen (Red Bull) ganó el Gran Premio de Estados Unidos, el decimonoveno del Mundial de Fórmula 1, que se disputó este domingo en el Circuito de las Américas de Austin (Texas).
Verstappen, de 28 años, firmó su sexagésima octava victoria en la F1 -la quinta del año- al ganar en Austin por delante del inglés Lando Norris (McLaren) y del monegasco Charles Leclerc (Ferrari), que concluyó tercero.

El australiano Oscar Piastri (McLaren), líder del Mundial, terminó quinto -justo detrás del siete veces coronado inglés Lewis Hamilton (Ferrari)- en una carrera que el doble campeón mundial español Fernando Alonso (Aston Martin) acabó décimo. Su compatriota Carlos Sainz (Williams) abandonó en la séptima de las 56 vueltas.

El cuádruple campeón del mundo neerlandés Max Verstappen (Red Bull), que ganó el Gran Premio de Estados Unidos, el decimonoveno del Mundial de Fórmula Uno, declaró este domingo en el Circuito de las Américas de Austin (Texas) que «la oportunidad de» conseguir un quinto título seguido «está ahí».
«Ha sido un fin de semana increíble para nosotros», comentó Verstappen, de 28 años, tras firmar su sexagésima octava victoria en la F1 -la quinta del año y la cuarta en Austin- al ganar por delante del inglés Lando Norris (McLaren) y del monegasco Charles Leclerc (Ferrari) una prueba que el otro piloto de la escudería de Woking, el australiano Oscar Piastri (McLaren), líder del Mundial, acabó quinto.

«Sabía que la carrera no iba a ser fácil, teniendo en cuenta la diferencia de ritmo entre el coche de Lando Norris y el mío», explicó el astro neerlandés, que también ganó el sprint del sábado y que en sólo dos días le recortó 23 puntos a Piastri. El australiano lidera ahora con 346 unidades, catorce más que su compañero inglés y con 40 respecto a él, a falta de cinco Grandes Premios y dos pruebas sprint.

«En la salida hemos logrado despegarnos y luego conseguimos pilotar con esa ventaja hasta la meta; algo que no fue fácil», explicó el ídolo deportivo de los Países Bajos tras completar un fin de semana de ensueño con el que ha puesto al rojo vivo el desenlace del Mundial.

