China informó que se prepara para transformar la robótica, en está ocasión con un plan ambicioso que busca revolucionar todos los sectores, desde fábricas hasta hogares. Con una inversión de 959 millones de dólares, el país pretende consolidarse como líder mundial en tecnología robótica para 2029.
Este nuevo proyecto tiene como objetivo fabricar más de un millón de robots humanoides y autónomos para 2025. Ciudades como Chongqing y Hangzhou se han convertido en los epicentros de esta iniciativa, impulsada por gigantes como BYD y Huawei. Una de las innovaciones clave es el desarrollo de robots que participan en su propia fabricación, optimizando procesos mediante ensamblaje, pruebas y control de calidad autónomos. Este enfoque reducirá costos y tiempos, marcando un antes y un después en la producción robótica.

Según, la startup AGI Bot, creada por Huawei en 2023, ya ha producido 962 robots humanoides equipados con inteligencia artificial avanzada. Estos robots destacan por su diseño modular, adaptándose a tareas en diversos entornos como logística, agricultura y atención sanitaria. Además, China está desarrollando robots humanoides con movimientos naturales y realistas, lo que promete redefinir la interacción entre humanos y máquinas. Incluso se han creado modelos más económicos para democratizar el acceso a la robótica avanzada.
En todo caso, el alcance de esta tecnología será amplio y transformador en:
🔘 Agricultura: Robots para cultivar, cosechar y gestionar recursos naturales.
🔘 Sanidad: Ayuda en cirugías, cuidados intensivos y gestión hospitalaria.
🔘 Hogares: Limpieza, asistencia a personas mayores y automatización de tareas cotidianas.

Por otra parte, a pesar de los avances, China enfrenta desafíos como alcanzar la plena autonomía de los robots y lograr su aceptación social. Sin embargo, el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información proyecta que esta tecnología será un motor económico clave para 2027. El plan no solo busca transformar el panorama nacional, sino también posicionar a China como líder en la exportación de modelos de automatización. Siguiendo su éxito en sectores como los vehículos eléctricos, el país apunta a que su revolución robótica inspire a otras naciones en la modernización de procesos industriales y sociales.
En conclusión, la era de los robots está más cerca que nunca, y China se posiciona al frente de esta revolución.