Un terremoto de magnitud 7.3 causó, este martes 17 de diciembre del 2024, severos daños en la capital de Vanuatu, Port Vila. Esta ciudad se vio afectada por cortes de comunicación y donde equipos de rescate buscan a posibles víctimas mortales entre los escombros mientras los servicios de emergencia del país atienden a decenas de heridos.
El sismo ocurrió a las 12:47 hora local (05:47 hora de Ecuador), con el epicentro localizado unos 30 kilómetros al oeste de la capital de Vanuatu y a una profundidad de 57,1 kilómetros bajo el lecho marino, según el Servicio Geológico de Estados Unidos, que registra la actividad sísmica en todo el mundo.
El Centro Sismológico Euromediterráneo (EMSC), por su parte, elevó la magnitud del temblor a 7,4. Poco después se sintió una réplica de magnitud 5,5, seguida de una cadena de temblores menores que estremecieron el archipiélago.
¿Dónde queda Vanuatu?
Vanuatu es un país insular situado al sureste del océano Pacífico. El archipiélago es de origen volcánico y se encuentra a unos 1750 kilómetros al este de Australia, 500 kilómetros al noreste de Nueva Caledonia, al oeste de Fiyi y al sur de las Islas Salomón, cerca de Nueva Guinea.
Está compuesto de 12 islas grandes y 70 islotes, cuya superficie total cubre un área de 1.300 kilómetros. Las islas, sobre todo las mayores, son volcánicas y muy montañosas, con estrechas llanuras costeras.
Más del 70% de su terreno son bosques salvajes, el 10% cultivos y el resto propiedades privadas. Su clima es cálido y con elevadas precipitaciones.
Los terremotos son habituales en este archipiélago de baja altura con unos 320 000 habitantes. El país se encuentra en el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de intensa actividad sísmica y volcánica.
Vanuatu es uno de los países más expuestos a desastres naturales como terremotos, tormentas, inundaciones o tsunamis, según el informe World Risk Report.
Destrucción y angustia
La cadena de televisión VBTC, uno de los pocos medios que publicó imágenes desde el terreno, mostró cómo decenas de personas acudían a un centro hospitalario capitalino en furgonetas, coches y transportados en brazos por terceros, así como carreteras bloqueadas por deslizamientos de tierra y edificios y vehículos destrozados.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó, en su cuenta de X, que ha desplegado un equipo sobre el terreno que asiste al Hospital Vila Central y al Ministerio de Salud en las acciones de emergencia. Se desconoce por el momento el número preciso de víctimas, sin que las autoridades de Vanuatu hayan informado al respecto.
En su cuenta de X, Katie Greenwood, jefa de delegación de la Federación Internacional de la Cruz Roja en el Pacífico, señaló que hay al menos 6 fallecidos y muchos heridos. Además, que la comunicación con los equipos sobre el terreno se ve afectada por las interrupciones en los servicios de comunicación.
Dan McGarry, periodista en Vanuatu, dijo por su parte a EFE que las autoridades policiales en Port Vila le informaron de la muerte de una persona y que él mismo vio poco después del terremoto varios heridos, entre ellos tres «graves».
El reportero advirtió que por el momento se desconoce la magnitud de los daños fuera de la capital por el corte en las comunicaciones.
Número de víctimas desconocido y edificios colapsados
«El terremoto fue extremadamente violento, tuve solo tiempo de coger a mi hijo del brazo y salir al garaje, pero nos caímos al suelo al tratar de agarrar a mi mujer», dice a EFE por mensaje desde Port Vila Stéphane Rivier, que comparte imágenes del impacto en su propiedad, con daños de un «90%», calcula.
La familia se declara a salvo y señala que ha habido unos «10 o 12« temblores desde el primero.
«Hay gente en los edificios de la ciudad. Había cadáveres allí cuando pasé», aseguró a la AFP el residente Michael Thompson en una conversación por teléfono satelital, después de publicar en redes sociales imágenes de la destrucción.
Además, un desprendimiento de tierra sepultó un autobús, dijo Thompson, evocando la posibilidad de más víctimas. Dijo que el sismo también derribó al menos dos puentes y otro edificio.
Varias embajadas informaron de daños en sus edificios en Vanuatu. La Embajada de EE.UU. publicó un comunicado en el que afirma que su edificio en Port Vila ha sufrido «daños considerables» y que «está cerrada» hasta próximo aviso.
Posteriormente publicó otro comunicado en el que afirma que todo su personal de la legación se encuentra a salvo.
El ministro de Exteriores de Nueva Zelanda, Winston Peters, indicó por su parte en X que su legación en la capital, que comparte espacio con la de EE.UU., Francia y Reino Unido, ha sufrido «daños significativos«.
Igualmente, la ONG CARE señala en un comunicado que su oficina en Port Vila ha sufrido daños y que «muchos edificios han colapsado» en la urbe. «La electricidad y el agua están cortados en la mayor parte de la capital», de cerca de 50 000 habitantes, añade.
Comunicación afectada y vuelos cancelados
Según el observatorio independiente de seguridad cibernética NetBlocks, la conexión a internet prácticamente se perdió en Vanuatu tras el terremoto.
La filial de Vodafone en Vanuatu indicó en un mensaje publicado en Facebook que los servicios técnicos han logrado restablecer el servicio de llamadas internacionales, mientras que aún trabajan para recuperar el servicio de internet en el país.
Por su parte, algunas aerolíneas, entre ellas Jetstar y Qantas, anunciaron hoy la cancelación de sus vuelos a Port Vila programados para esta semana ante «informes de posibles daños» en el aeropuerto de la capital.
Tras el seísmo, el Centro de Alertas de Tsunamis del Pacífico, con sede en Honolulu, activó la alerta de tsunami, que se suspendió posteriormente. EFE/AFP