Tras casi tres meses consecutivos de apagones, el presidente Daniel Noboa confirmó que a partir del 20 de diciembre del 2024 se suspenden los cortes de luz en Ecuador. Lo hizo mediante una carta publicada este martes 10 de diciembre en su cuenta de la red social X.
Según el mandatario, la decisión se sustenta en cuatro factores: la recuperación de la capacidad instalada, la incorporación de nueva generación de energía, la compra de energía a Colombia y la mejora de las condiciones meteorológicas.
En la carta, Noboa señala que el mantenimiento y recuperación de centrales térmicas e hidroeléctricas sumó 696,7 MW al sistema eléctrico. Además, «tras 14 años de espera y haber generado energía con una capacidad mínima, el proyecto Toachi Pilatón aportará 204 MW al país», escribió.
Por otro lado, dijo que están operativos 100 MW de generación firme flotante, y entre diciembre y enero se añadirán 501 MW más.
También recalca la compra de energía a Colombia tras intensas negociaciones entre los funcionarios de ambas naciones.
El último factor es la mejora en las condiciones meteorológicas. Las lluvias de los últimos días permitió mejorar el embalse que alimenta la Central Hidroeléctrica de Mazar y el Complejo Hidroeléctrico de Paute.
Desde el pasado 30 de septiembre, el país enfrenta apagones debido a la peor crisis energética de su historia que obligó a aplicar racionamientos de hasta 14 horas. Noboa atribuyó la crisis a «los efectos del cambio climático, sumados a la negligencia y mala gestión de gobiernos pasados».
«Los culpables de la corrupción en este sector ya han sido procesados. Danilo Carrera, cuñado del expresidente, y Antonio Icaza, exgerente de CNEL, fueron sentenciados a diez y nueve años de cárcel respectivamente por sus actos de corrupción en este sector», mencionó.
Finalmente, Noboa agradeció a los ecuatorianos por su resiliencia y fortaleza. «Así como ustedes han demostrado ser un ejemplo de perseverancia, nosotros hemos hecho todo lo necesario para que, independientemente de las condiciones climáticas que nos afecten en el futuro, esta sea la última crisis energética que golpee de esta forma al Ecuador».