
El Tour de Francia 2025 volverá a comenzar en tierras galas cuatro años después. Lille albergará la Gran Depart de la 112.ª edición de la Grande Boucle que volverá a finalizar en los Campos Elíseos de París.

Esperan 21 etapas para un total de 3.338 kilómetros y 52.500 metros de desnivel íntegros en territorio francés. Serán siete etapas llanas, seis de media montaña, seis de montaña con cinco llegadas en alto en Hautacam, Luchon- Superbagnères, Mont Ventoux, Courchevel Col de la Loze y La Plagne Tarentaise y dos contrarrelojes.
1ª Etapa – 5 de julio: Lille – Lille / 184,9 km
El Tour arranca con una etapa de 185 kilómetros con salida y llegada en Lille. El trazado presenta las primeras cotas puntuables de la actual edición, pero todo apunta a que será el escenario de la primera volata masiva en la capital de Alta Francia.

2ª Etapa – 6 de julio: Lauwin-Planque – Boulogne-sur-Mer / 209,1 km
Jornada maratoniana con 2550 metros de desnivel acumulados repartidos en tortuosas cotas. Los ascensos a Saint-Étienne-au-Mont, con un desnivel de hasta el 15 % y, posteriormente, Outreau, a falta de poco más de cinco kilómetros para la meta, pueden favorecer algún ataque para ganar la etapa. Superadas las dos colinas finales, los corredores afrontarán un exigente repecho de un kilómetro que puede determinar al ganador del día o picar segundos por el amarillo.

3ª Etapa – 7 de julio: Valenciennes – Dunkerque / 178.3 km
Nueva oportunidad para los sprinters aspirantes al maillot verde. El viento y la consiguiente posibilidad de abanicos obligarán a todo el mundo a mantener las orejas tiesas en una jornada en la que la cota de Cassel (2,3 km al 3,8%) emerge como única ascensión del día a 31 km de meta.

4ª Etapa – 8 de julio: Amiens – Rouen / 174.2 km
Jornada perfecta para que finalizadores como Van Aert, Van der Poel o Alaphilippe muestren su potencial. Todo se concentra en los últimos 40 kilómetros con cinco cotas perfectas para bonita batalla final. Las cotas de Jacques Anquetil (3,5 Km al 3,6%), Belbeuf (1,3 km. al 9,1%), Bonsecours (900. al 7,2%), GrandMare (1,8 km. al 5%) y la exigente Rampa Saint-Hilare (800 m. al 19,6%) pueden reventar la carrera en su tramo definitivo.

5ª Etapa – 9 de julio: Caen – Caen (CRI) / 33 km
Primera gran llamada de atención a los contendientes por la general. La primera contrarreloj del Tour 2025 presenta un trazado perfecto para los especialistas. Gran parte del circuito discurrirá por carreteras anchas y completamente llanas, que permitirán montar grandes desarrollos para dar buena potencia de pedalada.

6ª Etapa – 10 de julio: Bayeux – Vire Normandia / 201,5 km
Se trata de una jornada rompepiernas que presenta más de 3.500 metros de desnivel acumulado. Tras cinco pasos de tercera, la cota de Vaudry (1,2 km al 7,2%) abrirá fuego antes del explosivo final con 700 metros al 10%.

7ª Etapa – 11 de julio: Saint-Malo – Muro de Bretaña / 197 km
Etapa que seguro trae buenos recuerdos a Mathieu Van der Poel que en 2021 logró imponerse y vestirse de amarillo en este mismo final. Toda la acción se concentra al final con un doble paso decisivo por el Muro de Bretaña, una subida de 2 kilómetros al 6,9% con rampas de hasta el 15%.

8ª Etapa – 12 de julio: Saint-Meen-le-Grand – Laval Espace Mayenne / 171.4 km
Jornada que apunta a un final con sprint masivo. La criba la puede realizar el último kilómetro que se presenta siempre ascendente y puede dejar fuera de combate a los velocistas que lleguen más justos al final.

9ª Etapa – 13 de julio: Chinon – Chateauroux / 170 km
Día de trabajo para los equipos de los sprinters que van a tener que controlar la etapa para que sus líderes puedan rematar en la ‘Cavendish Avenue’, una línea recta que aportará seguridad en la volta y permitirá a los cohetes del pelotón mostrar toda su potencia.

10ª Etapa – 14 de julio: Ennezat – Monte Dore-Puy Sancy / 163 km
El día de la Fiesta Nacional de Francia llega con una etapa explosiva que presenta siete puertos para un total de 4.450 metros de desnivel. Un día sin tregua que culminará con la explosiva ascensión a la estación de Le Mont-Dore (3,3 km al 8%). Día clave para que los aspirantes por la general se muestren

11ª Etapa – 16 de julio: Toulouse – Toulouse / 154 km
Tras el primer día de descanso, el pelotón afronta una jornada llena de trampas. El recorrido aparece trufado de cotas para un total de 1750 metros de desnivel. La colina de Pech David, con rampas máximas del 20%, se corona a ocho de metas y puede jugar un papel clave en el devenir final de la etapa.

12ª Etapa – 17 de julio: Auch – Hautacam / 181 km
Los Pirineos asoman con una etapa que presenta toda la pólvora en su fase final. Esperan 3850 metros de desnivel que se concentran en los tres puertos finales. Abre fuego el Col du Soulor por Ferrière (11,9 km al 7,3%), tras él llegará el Col de Bordères (3,1 km al 7,7%) y tras ello llegará el final en alto en Hautacam, de 13,6 km de longitud y una pendiente media del 7,8%.

13ª Etapa – 18 de julio: Loudenvielle – Peyragudes (CRI) / 11 km
Crono escalada asfixiante con final en el mítico altipuerto de Peyragudes (8 km. al 7,9%). La ascensión presenta rampas de hasta el 16% de desnivel que puede costar el Tour a algún favorito que no esté fino ese día.

14ª Etapa – 19 de julio: Pau – Luchon-Superbagnères / 182,6 km
El diseño de la etapa es un calco de la jornada 16 de 1986, en la que se impuso Greg Lemond y Robert Millar fue segundo a 1:12″. Clásica jornada pirenaica con casi 5000 metros de desnivel y un encadenado que sale solo: Tourmalet (19 km al 7,4%), Col de Aspin (5km al 7,6%), Col de Peyresourde (7,1 km al 7,8%) y traca final con la temible ascensión a Superbagnères (12,4 km al 7,5 %).

15ª Etapa – 20 de julio: Muret – Carcasona / 169,3 km
2.400 metros de desnivel acumulado en menos de 170 kilómetros pueden favorecer que una buena escapada organizada termine triunfando. La cota de Saint-Ferréol (1,7 km al 7%) y el Pas du Sant (2,9 km al 10%) pueden favorecer ataques clave ante del descenso de 40 kilómetros con el que finaliza la etapa.

16ª Etapa – 22 de julio: Montpellier – Mont Ventoux / 172 km
Etapa monopuerto con batalla final en el Mont Ventoux (15,7 km. al 8,8%). El inicio de la etapa no presenta grandes dificultades, pero seguro será nervioso por las estrategias o la búsqueda de una fuga ganadora que, todo apunta, que lo tendrá complicado para triunfar.

17ª Etapa – 23 de julio: Bollène – Valence / 161 km
Etapa nerviosa previa a la gran montaña. Presenta dos cotas que parecen muy lejos de meta, lo que va a complicar que la fuga triunfe. Día de orejas tiesas en la que nadie puede despistarse ni por la etapa ni por la general.

18ª Etapa – 24 de julio: Vif – Col de la Loze (Courchevel) / 171 km
El Tour de la posibilidad de revancha a Tadej Pogacar. El esloveno regresa al escenario de su último desfallecimiento («I’m gone , I’m dead») donde cedió por penúltima vez ante Vingegaard. La jornada presenta un desnivel apocalíptico de 5450 metros de desnivel con final en el coloso infinito de Col de la Loze (24,6 al 6,4%). Antes se suben otros dos puertos de especial: Col du Glandon (21,7 km al 5,1%) y Col de la Madeleine (19,2 km al 7,9%). Día clave por el amarillo y la general en el que los líderes tienen que dar un paso al frente. Asistimos a la etapa reina del Tour.

19ª Etapa – 25 de julio: Albertville – La Plagne / 130 km
Otro día para que exploten las piernas con cinco ascensiones (4.550 metros de desnivel) condensadas en apenas 130 kilómetros. Esperan dos segundas, un primera y dos ascensos de especial: La Pré (12,6 km al 7,7%) y La Plagne (19,1 k al 7,2%). Miguel Induráin firmó en La Plagne una de las grandes exhibiciones de su carrera en 1995 con uno de los mejores ataques de su historia para salvar el amarillo ante Zulle. Desde 2002 no se ascendía en el Tour.
