París, que acogerá sus primeros Juegos Paralímpicos dentro de tres años, ya ha tomado el testigo. Justo antes de que se extinguiera la llama paralímpica en Tokio durante la ceremonia de clausura, la alcaldesa de la capital de Francia, Anne Hidalgo, recibió la bandera paralímpica de manos del presidente del Comité Paralímpico Internacional (CPI), Andrew Parsons, este domingo.
Esta entrega simbólica del relevo entre Tokio y París por el intermediario del CPI estuvo marcada por una fiesta en la capital gala, que acogerá la 17ª edición de los Paralímpicos en 2024 (28 agosto-8 septiembre).
Cuatro semanas después del final de los Juegos Olímpicos, la ceremonia de este domingo puso punto y final a los Juegos de Tokio, retrasados un año y amenazados hasta el final por la pandemia del covid-19.