Mediante el Decreto Ejecutivo número 561, el presidente de la República, Guillermo Lasso, decidió extender por 30 días más el estado de excepción en la Zona 8, conformada por Guayaquil, Durán y Samborondón, la jurisdiscción más violenta del país.
Esta prórroga del estado de excepción tiene los mismos términos establecidos en el anterior decreto, por ejemplo, no existe toque de queda.
La medida supone mayor presencia policial y militar en las calles. Tanto la Policía Nacional como las Fuerzas Armadas deben coordinar acciones, incluso con los municipios, para ejecutar operativos de control e intervenciones.
Mediante el estado de excepción se suspende el derecho a la inviolabilidad del domicilio, es decir, la fuerza pública puede inspeccionar y requisar inmuebles, bajo sospecha de almacenamiento de droga, armas o explosivos.
Además, se suspende el derecho a la inviolabilidad de correspondencia enviada o recibida, lo que significa que agentes pueden inspeccionar la mensajería de los ciudadanos si existe sospecha de alguna actividad ilícita.
Esta extensión del estado de excepción inicia cuando en la Zona 8 se han registrado casi mil asesinatos, en lo que va del año.