La semana pasada, dos perros aparecieron ahorcados en un canal de agua de la ciudadela Venecia, Conjunto el Garrochal, ubicado en Guamaní (sur de Quito).
Al parecer, el suceso ocurrió entre la noche y madrugada, puesto que en la mañana cuando Lorena Hidalgo, moradora del sector, salió a caminar se encontró con los animales sacrificados.
Una imagen captada por los moradores del sector y subida en redes sociales muestra a los canes colgados de una soga. Se trata de un perro de raza pitbull y otro de raza french poodle.
La impactante escena no tardó en hacerse viral y en causar indignación en los usuarios. Hasta este viernes 22 de octubre del 2021, se desconoce quiénes fueron los responsables del atroz acto.
Protección Animal Ecuador (PAE) y Fundación Camino a Casa denunciaron el lamentable hecho el lunes 18 de octubre.
Al hacer la autopsia a los perros, se determinó que habían sido maltratados. Nadie reclamó por ellos, por lo que se presume, eran callejeros.
Los habitantes de Garrochal enterraron los cuerpos de los canes en un terreno que queda cerca del canal. Sospechan que podría tratarse de un ajuste de cuentas de bandas delictivas.
También señalaron que un grupo de jóvenes que consumen sustancias estupefacientes acostumbran concentrarse cerca de ese canal de agua. Los vecinos se encuentran asustados, consideran que el sector donde viven no es para nada seguro.
Quien conozca algún dato importante sobre el tema, puede comunicarse al correo info@pae.ec. La identidad de la persona será confidencial y se mantendrá en absoluta reserva.
El artículo 251 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) determina que “la persona que mate a un animal que forma parte de la fauna urbana será sancionada con pena privativa de libertad de seis meses a un año. Si la muerte se produce como resultado de actos de crueldad será sancionada con pena privativa de libertad de uno a tres años”.