El italiano Enea «La Bestia» Bastianini (Ducati Desmosedici GP21) consiguió la primera victoria de su carrera deportiva en MotoGP al vencer el Gran Premio de Qatar en Lusail, en donde Pol Espargaró (Repsol Honda RC 213 V), líder durante dieciocho vueltas, se tuvo que conformar con el tercer puesto.
A pesar de dominar la carrera desde la primera vuelta hasta la dieciocho, un bajón de rendimiento de sus neumáticos le obligó a entregar la victoria prácticamente en bandeja a «La Bestia», e incluso el segundo lugar al surafricano Brad Binder (KTM RC 16), al colarse en la apurada de frenada de final de recta.
El adelantamiento de Bastianini a Binder en realidad fue una premonición de lo que estaba por suceder pues vuelta tras vuelta el italiano se fue acercando al español, al que superó en la recta de meta a cuatro vueltas del final mientras el de Repsol Honda se iba largo en la apurada de frenada de la curva uno en su intención de mantener la posición e incluso perdió la segunda plaza en favor de Binder.
«La Bestia» Bastianini se fue en solitario camino de la victoria, la primera de su carrera deportiva en MotoGP, por delante de Brad Binder y de Pol Espargaró, que aguantó el ataque final de su hermano Aleix Espargaró.
El quinto puesto fue para Marc Márquez, por delante de los dos pilotos de Suzuki, Joan Mir y Alex Rins, con Fabio Quartararo en novena posición, superado en los metros finales por su compatriota Johann Zarco (Ducati Desmosedici GP22).



