Dominado por la euforia, el presidente de Argentina, Javier Milei, ofreció este lunes un recital de rock ante unas 15 000 personas en el estadio Movistar Arena de Buenos Aires. El espectáculo sirvió como antesala de la presentación de su nuevo libro La construcción del milagro, y se convirtió en un acto político cargado de simbolismo, música y mensajes dirigidos a sus seguidores.
Vestido completamente de negro y con una campera de cuero, Milei ingresó al escenario entre la multitud mientras sonaba un tema de los Rolling Stones. Lo acompañaba La banda presidencial, integrada por varios de sus allegados, entre ellos el diputado Bernie Benegas Lynch y la diputada Lilia Lemoine. El mandatario interpretó clásicos del rock argentino como Demoliendo hoteles, de Charly García, y Libre, de Nino Bravo, en medio de un ambiente que combinó el fervor político con la estética del rock.
Durante el evento, el mandatario también aprovechó para pronunciar un discurso en defensa de Israel, al que calificó como el bastión de Occidente, y cerró esa parte cantando Hava Naguila, una canción tradicional hebrea.
La presentación se dio en un contexto complicado para su Gobierno: tras una derrota electoral frente al peronismo el 7 de septiembre, la renuncia de su principal candidato a diputado, José Luis Espert, por un escándalo de financiamiento y las gestiones de su ministro de Economía, Luis Caputo, en Washington para asegurar un rescate financiero prometido por Donald Trump.
Tras el concierto, Milei volvió al escenario para presentar formalmente su libro ante un público ya reducido y acompañado por su portavoz, Manuel Adorni. Con esta puesta en escena, el presidente argentino buscó revivir la mística de su campaña de 2023 y reposicionarse como un outsider frente a la clase política tradicional, en medio de un clima social y económico cada vez más tenso.