Ahora, la empresa alemana H2Fly completó con éxito una prueba y lo hizo con un avión eléctrico propulsado por hidrógeno líquido, lo que marca un hito para los vuelos de larga distancia sin emisiones. Para esta novedad, el desarrollador del sistema de propulsión dio a conocer este jueves los detalles de su última campaña de pruebas aéreas, que incluyó cuatro vuelos distintos en el avión eléctrico de demostración HY4, pilotado por primera vez por una persona.
De esta manera, en lugar de utilizar hidrógeno gaseoso presurizado como en el pasado, la aeronave eléctrica HY4 se propulsó con hidrógeno líquido almacenado criogénicamente, lo que permitió reducir considerablemente el peso y el volumen del depósito, además de duplicar la autonomía máxima de la aeronave de 750 kilómetros a 1.500.
Por su parte, Josef Kallo, cofundador de H2Fly, comentó que esta nueva tecnología será ampliada para aviones regionales y otras aplicaciones, «iniciando la misión crítica de descarbonizar la aviación comercial». «Este logro marca un hito en el uso de hidrógeno para propulsar aviones. Junto con nuestros socios, hemos demostrado la viabilidad del hidrógeno líquido para vuelos sin emisiones de medio y largo alcance», resaltó Kallo.