El caso Nene recayó en manos de la jueza de la Corte Nacional de Justicia, Daniella Camacho. La magistrada pidió autorización a la Asamblea Nacional para procesar a la vicepresidenta Verónica Abad este miércoles 12 de junio del 2024.
En el documento, enviado al presidente del Legislativo, Henry Kronfle, dio un «plazo no mayor a 48 horas» para que emita el correspondiente pronunciamiento, respecto de «la autorización para el enjuiciamiento penal» de la Segunda Mandataria.
Precisamente, este miércoles 12 de junio, Kronfle ya convocó al Pleno de la Asamblea Nacional para que este viernes 14 de junio del 2024, a las 12h30, conozca y resuelva la autorización para enjuiciar penalmente a la vicepresidenta Abad, por el delito de concusión.
Por otra parte, la audiencia, donde se reformularán cargos y se vinculará a la etapa de instrucción fiscal a la Segunda Mandataria, está convocada para el lunes 17 de junio del 2024 a las 14:45 en la Corte Nacional de Justicia.
La Fiscalía anunció que vinculará a Verónica Abad al caso Nene tras encontrar documentación relacionada a «la contratación del denunciante» que involucraría directamente a la Vicepresidenta e información telefónica donde se determinó su participación.
Luego, se dispuso que el caso se direccione a la Corte Nacional porque Abad cuenta con fuero del máximo órgano de justicia. Y el proceso lo asumió la fiscal general del Estado, Diana Salazar, quien decidió cambiar el delito de oferta para realizar tráfico de influencias a concusión.
Con este pedido, en la Asamblea se necesitan 91 votos para autorizar el enjuiciamiento penal. ADN, hasta la fecha, cuenta con 36 votos seguros, por lo que debería sumar 55 en medio de una fuerte pugna política con las bancadas de Revolución Ciudadana, Construye y Partido Social Cristiano (PSC).
En caso de autorizarse el proceso penal contra la Vicepresidenta se podría dictar medidas cautelares, como prisión preventiva, lo cual le imposibilitaría ejercer su cargo. Y luego de tres meses, la Asamblea declararía la ausencia definitiva.
Y permitiría al presidente Daniel Noboa nombre a su reemplazo con un terna, como ocurrió en 2018 con el exvicepresidente Jorge Glas.
No obstante, al ser procesada por concusión también se abre otro camino que la dejaría fuera de la Vicepresidencia. Este es el juicio político que establece a este delito como una de las causales válidas para iniciar su censura y destitución.