El Gobierno se planteó lograr la meta en cuatro años. Para ello lanzó un plan ambicioso, que depende de una reforma que abra al país a una mayor inversión privada, la cual debe pasar por la Asamblea, donde no tiene mayoría.
La inversión privada es necesaria, según los expertos, porque el Fisco no cuenta con dinero. El bombeo fue de 498 000 barriles diarios a mayo pasado, la cifra más baja de los últimos cinco años. El presupuesto para la producción de crudo también cayó. En el 2020 fue de USD 1 425 millones, cuando en el 2014 era de 3 291 millones.
Duplicar la producción petrolera requiere de una inversión de USD 12 000 millones y cinco años de trabajo.
Para ello, dispone que Petroecuador identifique las áreas susceptibles de delegación. Además, se plantea iniciar un proceso de renegociación con las firmas privadas para que migren libre y voluntariamente a contratos de participación, que serán reformulados. Para todas estas acciones, se plantea una reforma legal
La nueva política petrolera del Gobierno establece la venta de todas las estaciones de servicio de Petroecuador, que deberá realizarse de forma inmediata.
La normativa establece que en 60 días se revise y reporte el estado integral del funcionamiento de todos los sistemas de transporte de hidrocarburos y de las refinerías del país, para conocer en qué situación se hallan y qué se puede hacer para pasarlas a manos privadas.
Fuente: el Comercio