FÓRMULA 1 || Max Verstappen un nuevo triunfo, pero esta vez en su propia casa

El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) impuso su ley en casa, en el Gran Premio de los Países Bajos de Fórmula Uno, arropado por su gente y saliendo ganador, otra vez, de una batalla con Ferrari y Mercedes que estuvo condicionada por los incidentes en pista que hundieron al británico Lewis Hamilton (Mercedes) y acabaron por arruinar la carrera del español Carlos Sainz (Ferrari), no así la de Fernando Alonso (Alpine), quien remontó siete puestos.

Un triunfo más para el campeón y Red Bull, no tan sobrados como en Bélgica una semana antes, y otra pifia de Ferrari, que comenzó a destrozar la desafortunada carrera de Sainz con una parada de más de 12 segundos por olvidarse del neumático trasero izquierdo.

La salida fue limpia. El líder tapó a Charles Leclerc y Carlos Sainz hizo lo propio con Lewis Hamilton, que llegó a tocarle, sin consecuencias. Russell perdió una posición con Lando Norris, aunque la recuperó en la cuarta vuelta, y Ocon ganó tres para situarse noveno, algo que no logró Fernando Alonso, decimotercero. El bicampeón, con mejor ritmo, perdió tiempo detrás del francés Pierre Gasly (Alpha Tauri).

El único sobresalto en las primeras vueltas lo protagonizó Kevin Magnussen, que perdió el control de su monoplaza, se fue a la grava, tocó el muro y, milagrosamente, pudo regresar a la pista y continuar la carrera.

Al paso por la vuelta 10, Verstappen disfrutaba de 1.7 segundos sobre Leclerc, con Sainz ya descolgado y con Hamilton en los retrovisores del Ferrari.

Otro incidente, esta vez por un problema mecánico del Alfa Romeo del finlandés Valtteri Bottas, que se quedó tirado en la recta de meta, obligó a sacar el safety y a desviar, incluso, a los coches por el pit lane.

Hamilton no cambió neumáticos, Verstappen y Russell, como la mayoría, sí, la carrera se relanzó a falta de 12 vueltas. El neerlandés, como cuando campeonó el año pasado, le superó enseguida, casi sobre la línea de meta (tenía que pasarle después de cruzarla), en parte porque el británico se precipitó al abrir la carrera.

El líder se fue a por su décimo triunfo, el cuarto consecutivo, los Mercedes, con enfado de Hamilton, intercambiaron posiciones, y el de Stevenage, de luchar por la victoria, pasó a quedarse fuera del podio al verse adelantado por Leclerc.