La fiscal general de Estados Unidos, Pamela Bondi, anunció este jueves 7 de agosto una recompensa de USD 50 millones a cambio de información que permita capturar al dictador venezolano Nicolás Maduro.
Estados Unidos acusó a Nicolás Maduro en 2020, durante la primera presidencia de Donald Trump, por delitos de narcotráfico y terrorismo y en enero de 2025, la actual Administración aumentó la recompensa por su captura a 25 millones de dólares.
Bondi compartió en sus redes sociales un video en el que describe esta recompensa como «histórica» y calificó a Maduro como uno de los mayores narcotraficantes del mundo y una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos.
«Maduro utiliza organizaciones terroristas extranjeras como el Cartel de Sinaloa o el Cartel de los Soles para introducir drogas letales y violencia en nuestro país», indicó.
Además, la fiscal estadounidense anunció que hasta la fecha, «la Administración de Control de Drogas (DEA) ha incautado 30 toneladas de cocaína vinculadas a Maduro y sus socios», con casi siete toneladas vinculadas al mandatario venezolano, «lo que representa una fuente principal de ingresos para los carteles con sede en Venezuela y México».
Bondi también reveló que el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha incautado más de 700 millones de dólares en activos vinculados a Maduro, así como dos aviones privados y nueve vehículos.
«Maduro no escapará de la justicia y rendirá cuentas por sus atroces crímenes», concluye en su mensaje la fiscal general.