La Conaie consideró que el ingreso de la caravana presidencial a El Tambo, Cañar, fue una provocación política por parte del Gobierno, pues ese sitio permanece «en resistencia».
Cuestionaron que no se haya evaluado el riesgo de ingresar a una «zona en movilización» o la ausencia de un equipo de avanzada para analizar riesgos en los desplazamientos.
De ahí que, a su juicio, ese acto refleja una «falsa bandera» para criminalizar al movimiento indígena.
El ataque con piedras a la caravana presidencial dejó cinco detenidos, quienes son acusados de intento de asesinato al presidente Noboa. La Conaie pidió respeto al debido proceso, sin presiones políticas y que sean liberados.
Asimismo, el movimiento indígena resaltó que el Gobierno debería responder a la situación con el «diálogo».
«Reafirmamos nuestro compromiso con la paz, el diálogo y la unidad nacional en defensa de la vida y la dignidad de los pueblos», sentenció la Conaie.
Este miércoles 8 de octubre se cumplen 17 días de paro nacional que tiene a Imbabura como epicentro de los cierres viales.