Chris Paul y los Suns de Phoenix sufrieron una dolorosa derrota en casa ante los Bucks de Milwaukee (119-123) que les deja al borde del abismo en estas finales de NBA, pero el veterano base defendió que aún no hay nada decidido y pidió a su equipo que esté preparado para el próximo partido.
“Sabíamos que esto no iba a ser fácil. No esperábamos que lo fuera. Es duro. Nuestro entrenador nos lo ha dicho todo el año: lo que queremos está al otro lado de lo duro. Y no puede ser más duro que ahora”, dijo en una rueda de prensa.
Los Bucks lograron una enorme victoria a domicilio frente a los Suns que abre la posibilidad para que los de Milwaukee, que dominan por 3-2 las finales, puedan coronarse ante su público el próximo martes en el sexto partido.