El campeón de peso mediano Gennadiy Golovkin (GGG) presentó una demanda contra Golden Boy Promotions de Oscar De La Hoya el viernes en Los Angeles en busca de al menos $3 millones en daños en relación con la revancha de septiembre de 2018 con Canelo Álvarez.
Según la denuncia, obtenida por ESPN, GGG quiere que se le paguen intereses sobre los $9,025,351 que Golden Boy aún le debía en enero de 2021. Los fondos, que se pagaron el 6 de julio del año pasado, fueron parte del beneficio financiero del evento.
Golovkin tenía derecho al 45% de todos los ingresos brutos (recibos de entrada, patrocinio, ingresos de pago por evento, circuito cerrado de televisión, derechos de televisión internacional, etc.)
La pelea por el campeonato de las 160 libras, que Álvarez ganó por decisión mayoritaria, generó aproximadamente 1.1 millones de compras de PPV en los EE. UU. ($94 millones) y $27 059 850 en venta de boletos.
GGG alega incumplimiento de contrato, incumplimiento del deber fiduciario, conversión, fideicomiso constructivo y contabilidad. Él busca un juicio con jurado.
El nativo de Kazajstán, que ahora reside en Los Angeles, sostuvo que la suma de $9,025,351 era incorrecta debido a un error contable. El 27 de septiembre, Golden Boy entregó un informe contable revisado que mostraba que a GGG se le debían $1,375 millones adicionales, según documentos judiciales.
Golovkin exigió el pago, pero Golden Boy se negó, según la demanda. El boxeador busca al menos $450,000 en ingresos por patrocinio, $177,458 en «otros fondos simplemente no pagados, aunque figuran en las propias cuentas de Golden Boy», aproximadamente $31,500 (45% de alrededor de $70,000 en ingresos adicionales por PPV), gastos incurridos por el aplazamiento de la revancha después de que Álvarez dio positivo por una droga para mejorar el rendimiento y gastos de seguro no asignados.
Un portavoz de Golden Boy Promotions se negó a comentar sobre la demanda.
