Abiertamente, sin ningún cuidado o restricción. Son cientos de usuarios que muestran su interés de pertenecer a bandas delictivas en redes sociales. De acuerdo a la investigación que hizo Ecuavisa en al menos siete sitios.
«Busco gente que quiera lavar dinero». «Interesados en hacer una ‘vuelta’, escriban por interno», abundan este tipo de frases en los grupos, así como innumerables fotografías de armas.
Sobre estas es imposible precisar si las fotos son reales o corresponden al Ecuador. Lo que sí es cierto, es que de acuerdo a la norma, el control de las mismas es responsabilidad de las Fuerzas Armadas.
Según los datos que maneja esta institución, en el primer trimestre del 2022, se han incautado 348 armas de fuego.
En uno de los grupos, hay más de 17.900 miembros, solo en la última semana (del 5 al 12 de mayo) ingresaron 54 nuevos usuarios. La foto de portada corresponde a una pared con grafitis que incluye varios símbolos y signos identificativos de las bandas: una calavera, una águila, armas, un machete.
Se comparten videos con música alusiva a actos criminales, fotografías de armas, dinero, sustancias que aparentemente podrían ser drogas, sus rostros, números de teléfono, tatuaje.
Una publicación del administrador del grupo advierte que hay «infiltrados». Pide a los «hermanos» que reporten inconvenientes «por interno» y que ya han tomado acciones contra aquellos que no son miembros de la banda.
Sin embargo, abundan las publicaciones preguntándose cómo ser parte de una banda.
El director Nacional de Investigación Antidrogas de la Policía Nacional, el general Gilberto Ponce, reconoce que las escuelas y colegios son lugares propicios para que los delincuentes encuentren adeptos. Indica que su institución trabaja en actividades preventivas y reactivas para evitar que esto suceda.
Cristian lleva tres años lejos de la criminalidad, tuvo que migrar para poder distanciarse de varias amenazas de muerte; ahora es barbero, se llama a sí mismo «artesano». Reconoce que las redes sociales son el nuevo canal para conectar a los miembros y captar personas interesadas en pertenecer a la banda.
Lorena Piedra, docente universitaria, experta en Inteligencia y crimen organizado, explica que las estructuras criminales no son rígidas. Se adaptan de acuerdo a sus necesidades y las personas que las integran tienen que cumplir los diferentes roles en los distintos lugares en los que funcionan.
Por ejemplo, según la experta, necesitan personas encargadas de actividades como: sicariato, distribución y venta de la droga y actividades ilícitas, paralelas al narcotráfico.
Piedra explica que es necesario sumar nuevos integrantes para lograr la ‘expansión del negocio’ y también la conquista ideológica.
En las publicaciones encontradas, se identificó que los internautas buscan, entre otros intereses, «trabajo seguro». Algo que el Estado no puede garantizar.
7 de cada 10 ecuatorianos no tienen un empleo fijo, lo que significa que no perciben un ingreso que les permite satisfacer sus necesidades más básicas de alimentación, salud y educación.