Los apagones en Guayaquil propician escenarios de escasa iluminación y aquello es aprovechado por delincuentes que llegan a robar hasta generadores de energía. Aquella es una problemática que enfrentan en estos días los comerciantes de la Bahía.
En medio de los prolongados cortes de luz que llegan hasta catorce horas diarias en esta semana, en las calles Chile, Ayacucho, Eloy Alfaro, Chimborazo, entre otras, se han instalado generadores afuera de locales para tratar de mantener las operaciones.
Sin embargo, los delincuentes ya han robado dos de estos aparatos. En un caso, un hombre llegó hasta un local y de forma disimulada arrastró el equipo al acceso y se lo llevó cargando mientras los dependientes atendían a clientes.
Ahora, con cadenas, comerciantes tratan de mantenerlos asegurados a mallas metálicas y árboles.
Acompañado a ello, los comerciantes temen por atracos de antisociales que van a pie o en moto.
Con los apagones, las alertas delictivas aumentan, ya que a partir de las 18:00 varios de los corredores y aceras quedan en penumbras y con escaso patrullaje, según los comerciantes.
Ante ello, muchos de los comerciantes han decidido adelantar los cierres de sus locales de las 19:00 a las 16:00 o 17:00 como máximo.
Las ventas regulares han caído al 30 % o 40 %, lo que pone en peligro sus labores, expuso Hermo Chamba, comerciante.
Él es dirigente de la zona y debió despedir a uno de los dos trabajadores que le colaboraban en su puesto de calzado. “Hay gente que está quebrando”, reveló.
Entre compañeros han acomodado las jornadas con los trabajadores para evitar más despidos. Algunos los turnan para que laboren de tres a cuatro días de la semana.
“La delincuencia se las ingenia para llevarse hasta los generadores. Aquí se roban todo, hasta los focos si no hay un guardia”, expuso él, al pedir mayor apoyo de las autoridades.
Darwin Quiñónez, encargado del circuito policial Chile, dijo que se planifican operativos móviles y fijos; además, 60 policías se distribuyen en la zona para prevenir delitos.
En horarios de apagones, la acción policial se intensifica sobre todo en las zonas de mayor complejidad: en Ayacucho y Chile, av. Malecón y cercanías del mercado de Artículos Varios, más conocido como de las Cuatro Manzanas.
Lucía Peña, otra comerciante y dirigente, consideró que hacen falta acciones y que se debería aumentar de 60 a 100 policías, sobre todo entre viernes y domingo, en que hay una afluencia de 20.000 visitas.
“Ellos hacen su trabajo en función de lo que tienen, pero el Estado no nos manda lo que necesitamos… Son callejones oscuros. Las ventas han caído muchísimo, porque no hay seguridad”, citó la dirigente.
A diario, los comerciantes conviven con alertas de atracos. Entre los recientes casos estuvo el de un comerciante asiático al que le dispararon y se le llevaron el dinero que portaba.
Entre propietarios de locales se organizan para mantener un chat con la Policía, además de contratar a guardias particulares y armarse con bates.
En la reciente semana, la Policía detuvo a 25 personas por varios delitos, como robo y tráfico de drogas y extorsiones.
“Aquí el delito es por oportunidad: aprovechan el tema de apagones, el robo de personas y motos. Se les recomienda a los comerciantes tomar medidas de seguridad, estar pendientes”, citó Quiñónez.