Eran las 03:00 de la madrugada de este 16 de mayo del 2021 cuando la Policía ordenó el ingreso de 1 500 agentes a la Penitenciaría de Guayaquil. Tannya Varela, lideró la operación policial. Llegaron al centro carcelario en buses y camiones. Equipados con chalecos antibalas, cascos y escudos, los gendarmes ingresaron a los 12 pabellones de forma simultánea.
La idea era recorrer todos los pabellones de las bandas delictivas más fuertes del país. En esa lista están los Lobos, Tiguerones, Chonekillers y Los Choneros.
En las instalaciones, donde están miembros de esta última mafia, se encontró un taller artesanal para elaborar armas de fuego. Los agentes indicaron que los detenidos utilizaban todo tipo de metal para fabricar pistolas.

También se encontró armamento de grueso calibre. En las lámparas de las celdas se halló un fusil tipo militar y tres revólveres. Explosivos y decenas de armas blancas fue parte del material confiscado.
En esta intervención se identificó que los internos tienen las llaves de muchas puertas al interior de la cárcel. Incluso, se constató que formaron estructuras tipo garitas para vigilar desde los techos a la Policía. Desde esos sitios se sospecha que las bandas atacaban a sus enemigos durante las disputas.
Uno de los últimos enfrentamientos que se registró en la Penitenciaría sucedió el fin de semana pasado. Dos internos fallecieron. En mayo también hubo peleas. Ese mes se contabilizaron cinco muertos. En febrero fallecieron otros seis más.
Fuente: El Comercio