«Podían hacerle a uno morirse». Aníbal denunció este 17 de junio de 2025 que recibió un diagnóstico erróneo de Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Como paciente del hospital San Francisco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), en Quito, recibió «tremenda noticia» y tuvo que contarle el hecho a su esposa y jefes.
«Era una desesperación», recuerda Aníbal, denunciando que no se trata de un caso aislado.
Aníbal tomó la medicina antirretroviral, utilizada para suprimir la replicación del virus en el cuerpo, por dos semanas. Por la gravedad del supuesto padecimiento fue transferido al Hospital Carlos Andrade Marín, de tercer nivel.
Crisis en clínicas de diálisis
Como parte del protocolo, le repitieron los exámenes de sangre, y fue cuando los médicos descubrieron que el hombre no era VIH positivo.
«Son unas tremendas malas noticias que a uno lo desesperan», dijo Aníbal. Con los nuevos exámenes los médicos determinaron que el hombre sufre en realidad hipertiroidismo, una condición en la que la glándula tiroides produce demasiada hormona tiroidea.
De acuerdo con el médico investigador Esteban Ortíz, estos falsos diagnósticos ocurren principalmente por la falta de modernización del sistema de salud pública.
«Todavía estamos confiando en el estudiante de medicina, en la enfermera, que vaya a sacar la muestra y anote con un esfero», dijo Ortíz.